Y aquí estoy...

Mirando la pantalla silenciosa.
Acariciando tu nombre iluminado,
en un idilio con ese pequeño recuadro
donde tus sentimientos, tus palabras,
aparecieron por arte de magia.

Escucho tu voz a través de ellas,
descifrando intenciones, compartiendo sueños...
Por unos minutos soy parte de tus secretos.
Por unos minutos mi alma te toca.
Por unos minutos tú estás aquì y yo estoy allà.

Después, doy a una tecla precisa y
vuelve a estar cada amor, cada ternura,
cada soledad en su sitio ....